Una vez más burladero nos informa de curiosas historias taurinas. Esta vez nos demuestra que el toreo no entiende de nacionalidades ni de sexo.
Este reportaje nos hace darnos cuenta de cómo este arte tan español se extiende por el mundo, y son muchas las personas que se sienten atraídas por la práctica de la tauromaquia.
El vídeo muestra el caso de una chica ucraniana, residente actualmente en Albacete que llegó a España con el fin de practicar deportes y después se vio hipnotizada por el arte taurino. Desde hace tres años es alumna de la escuela taurina de Albacete y sueña con abrirse un camino en la tauromaquia.
Ver vídeo Ucraniana atraída por la tauromaquia